Principales resultados del Índice de Finanzas Sostenibles en LAC 2020
Ranking de Finanzas Sostenible para América Latina y el Caribe
Fuente: Elaboración propia para este informe
El resultado del Índice de Finanzas Sostenibles aplicado a la región de América Latina y el Caribe, sugiere que no existe un país que tenga 4 puntos, lo que significaría que tendría un balance entre los que ingresa y lo que gasta, tendiendo hacia finanzas más sostenibles. Sin embargo, el país con finanzas sostenibles más “ALTAS” es Honduras (con una calificación de 3,2 de 4 puntos), seguido de Costa Rica (con una calificación de 3,1 de 4 puntos). Mientras que Jamaica (2,9), Nicaragua (2,7), Guatemala (2,7), y Perú (2,6) tienen finanzas sostenibles “MEDIO ALTAS”. Por su parte República Dominicana (2), Panamá (2) y El Salvador (2) tienen finanzas sostenibles en un nivel “MEDIO”.
En el caso de Venezuela (1,9), Colombia (1,9), Brasil (1,9), Paraguay (1,7), Ecuador (1,7), Cuba (1,7), Uruguay (1,6) y Bolivia (1,6), se encuentran en la categoría de finanzas sostenibles “MEDIO BAJAS”. Mientras que México (1,5), Argentina (1,3) y Chile (1,2) se encuentran en la categoría de finanzas sostenibles “BAJAS”. Finalmente, Trinidad y Tobago (0,7) se encuentra en la categoría de “MUY BAJO”.
Este ranking, que resume los niveles de finanzas sostenibles en los países, debe verse en el contexto de los países de estudio y de acuerdo con su desempeño en cada una de las variables. Lo anterior porque hay países que pueden tener un buen desempeño en alguna de las variables, pero no en otras, por lo que su balance puede no ser favorable.
Ingresos Sostenibles
La primera variable del Índice, “Ingresos Sostenibles” (IS), se calculó con base en el porcentaje del financiamiento para el desarrollo dedicado a cambio climático (incluida la Ayuda Oficial al Desarrollo y otras fuentes bilaterales y multilaterales) respecto al total del financiamiento desembolsado para 2018, con base en el Aid Atlas del Instituto Ambiental de Estocolmo. Es decir, no se considera el monto final del financiamiento para el cambio climático, sino lo que éste representa del total del financiamiento desembolsado en el año de estudio.
El año de base para esta variable es 2018, por ser el año con la información más completa para todas las fuentes de financiamiento integradas. El resultado para la variable “Ingresos Sostenibles” permite observar la disparidad en cuanto a recepción de financiamiento para el desarrollo dedicado a cambio climático en la región, siendo un grupo de seis países los que concentran la mayor disponibilidad de ingresos sostenibles. De acuerdo con el análisis, el país con el mayor porcentaje de financiamiento para cambio climático del total del financiamiento para el desarrollo es México, con 7,12%, seguido de Costa Rica con 6,90% y de Bolivia con 6,60%, quienes de acuerdo con el ranking tienen ingresos sostenibles “MUY ALTOS” respecto a los 21 países analizados.
Mientras que Brasil (5,52%), Guatemala (5,00%) y Perú (4,68%) tienen ingresos sostenibles “ALTOS”. En este caso, aunque Brasil es el segundo país que recibe más financiamiento para el desarrollo, el porcentaje que se asocia a cambio climático es del 5,52%, lo que quiere decir que otras áreas han sido priorizadas y reciben más ingresos provenientes de estas fuentes. Por su parte, Honduras (3,71%) y Nicaragua (3,50%) tienen ingresos sostenibles “MEDIO ALTOS” y Ecuador (2,31%), Venezuela (2,00%) y Jamaica (1,53%) tienen ingresos sostenibles en un nivel “MEDIO”.
En la categoría de “MEDIO BAJO” se encuentran Cuba (1,49%), República Dominicana (1,12%) y Paraguay (1,01%). Estando en la categoría de “BAJO” Colombia (0,89%), El Salvador (0,40%), y Panamá (0,10%). Mientras que Argentina está en la categoría de “MUY BAJO” con 0,06%.
El caso de Colombia es de resaltar, porque es el país que recibe más financiamiento para el desarrollo de los 21 países de análisis, pero el financiamiento asociado a cambio climático representa sólo el 0,89%, lo que significa que la disponibilidad de recursos para el cambio climático es menor. Es importante señalar que algunos países como Chile, Trinidad y Tobago, y Uruguay no se registran como receptores de este financiamiento dedicado a cambio climático en el año de estudio.
* No se identifican ingresos.
Fuente: Elaboración propia para este informe
Ingresos Intensivos en Carbono
La segunda variable incluida en el IFS es “Ingresos Intensivos en Carbono” (IIC), la cual analiza la participación de actividades intensivas en carbono (exploración y extracción de hidrocarburos y minerales; y comercialización de combustibles) en los ingresos totales de los países. El análisis se realizó sobre los ingresos estimados u obtenidos, dependiendo de la información disponible en cada país, para el año 2019.
Los resultados del análisis muestran que, en general, todos los países reciben ingresos, en mayor o menor medida, de la exploración y extracción de hidrocarburos y minerales, y de los impuestos a los combustibles.
Los países con un nivel “MUY ALTO” de ingresos intensivos en carbono son Ecuador (28,54%), México (23,51%) y Trinidad y Tobago (19,25%). Asociado principalmente a los ingresos procedentes de la recaudación tributaria y no tributaria aplicable a la exploración y extracción de hidrocarburos.
Por su parte, Perú (12,15%), Chile (10,47%) y Colombia (10%), se encuentran en un nivel “ALTO” de ingresos intensivos en carbono. En los dos primeros casos esto se debe, principalmente, a la recaudación procedente de la actividad minera. Mientras que, en Colombia, son los ingresos por exploración y extracción de hidrocarburos los que explican su posición en el ranking.
República Dominicana (9,87%), Nicaragua (8,37%) y Bolivia (6,57%) se encuentran con un nivel “MEDIO ALTO”. Estando Uruguay (5,79%), Costa Rica (5,58%) y Argentina (5,14%) en un nivel “MEDIO”. A su vez, les siguen Guatemala (4,70%), Venezuela (4,43%) y Brasil (4,09%), con un nivel “MEDIO BAJO”.
Y finalmente con un nivel “BAJO” de ingresos intensivos en carbono, se encuentra Paraguay (3,01%) y con un nivel “MUY BAJO” están Panamá (1,20%), Honduras (0,40%), El Salvador (0,26%) y Jamaica (0,11%).
Esta variable permite conocer que muchas economías en la región mantienen aún una dependencia de ingresos intensivos en carbono, y lo importante que es esta área de trabajo para alcanzar la decarbonización de las finanzas públicas.
* Sin datos
Fuente: Elaboración propia para este informe
Presupuestos Sostenibles
La tercera variable incluida en el IFS es “Presupuestos Sostenibles” (PS), la cual analiza el presupuesto que los países asignaron y etiquetaron para cambio climático en el sector ambiental; energía renovable y eficiencia energética en el sector energético; y a la prevención y atención de desastres naturales en el sector a cargo de esta política en cada país durante 2019. Se analizan recursos etiquetados porque permiten identificar la adicionalidad de los recursos y cuantificar con mayor precisión las asignaciones presupuestarias.
El análisis realizado muestra que la asignación de presupuestos sostenibles es aún limitada en los países de estudio, pues no superó el 1% del presupuesto total en ninguno de ellos.
En el ranking, los países que más recursos destinaron a estos fines fueron Jamaica (0,58%) y Colombia (0,54%), situándose ambos en un nivel “MUY ALTO” de presupuestos sostenibles. A continuación, se sitúan Nicaragua (0,48%), Costa Rica (0,46%) y Cuba (0,42%), con un nivel “ALTO”.
Por su parte, Honduras (0,28%) y Ecuador (0,15%) se encuentran con un nivel “MEDIO ALTO” de presupuestos sostenibles. Estando en el nivel “MEDIO” Perú (0,12%), Paraguay (0,10%) y Guatemala (0,10%). Mientras que en el nivel “MEDIO BAJO” se encuentran Argentina (0,08%), Chile (0,06%), México (0,05%), Brasil (0,05%) y República Dominicana (0,05%).
Finalmente, El Salvador (0,03%), Trinidad y To-bago (0,02%) y Bolivia (0,01%) se encuentran con un nivel “BAJO”. Y Panamá (0,004%) y Paraguay (0,002%) están en el nivel “MUY BAJO”. Es posible que los países de estudio estén asignando recursos presupuestales a la atención del cambio climático sin que estos estén etiquetados, sin embargo, al no contar con dichas etiquetas, no es posible rastrearlos y, por lo tanto, contabilizarlos.
* Sin datos debido al nivel de agregación de la información disponible.
Fuente: Elaboración propia para este informe
Presupuestos Intensivos en Carbono
La cuarta variable incluida en el IFS es “Presupuestos Intensivos en Carbono” (IPC), la cual analiza el presupuesto asignado a la explotación de hidrocarburos, incluyendo exploración y extracción, refinación, petroquímica y transporte, entre otros, dentro del sector energético, incluyendo empresas estatales, cuando las hay.
El análisis reflejó que algunos países de la región invirtieron una parte muy importante de sus presupuestos públicos en la explotación de hidrocarburos en 2019.
En el ranking se identifica que el país que realizó la mayor asignación presupuestal en esta materia fue Bolivia (29,28%) colocándose en un nivel de presupuesto intensivo en carbono “MUY ALTO”. Seguido de México (11,07%) y Paraguay (7,68%), con un nivel “ALTO”.
Por su parte, Brasil (2,95%), Trinidad y Tobago (1,72%) y Argentina (1,01%) se encuentran en el nivel “MEDIO ALTO” de presupuestos intensivos en carbono. Mientras que Colombia (0,57%), Cuba (0,23%), Ecuador (0,17%), Jamaica (0,13%) y Chile (0,12%) se encuentran en un nivel “MEDIO”. Por otro lado, Venezuela (0,09%) y El Salvador (0,05%) se encuentran en un nivel “MEDIO BAJO”.
Finalmente, entre los países que menos presupuesto dedicaron a la explotación de hidrocarburos, situados en la parte inferior del ranking, se encuentra Nicaragua (0,02%) y Guatemala (0,02%) con un nivel “BAJO”. Mientras que Costa Rica (0,005%), Perú (0,003%), Honduras (0,003%,) y República Dominicana (0,001%) se encuentran con un nivel “MUY BAJO” de presupuestos intensivos en carbono.
Esta variable permitió conocer el rol que la explotación de hidrocarburos, principales fuentes emisoras de gases de efecto invernadero, juega en las prioridades presupuestales de los países de estudio.
(*) Sin presupuesto etiquetado.
Fuente: Elaboración propia para este informe